A este molino se accede por el paraje conocido como Valdepurgarina. El nombre de El Señorito hace alusión al dueño de la finca de El Villarejo (situada en la margen izquierda de la rivera) llamado Martín Tapia, en la época en la que estuvo en funcionamiento y que recuerdan los mayores. Este molino, según Benito Gallego, fue propiedad de Pepe el Hidalgo, vecino de Monleras y a quien lo compró este señor acaudalado, ya que previamente había entrado en pleitos con los vecinos de Monleras, por el aprovechamiento de las tierras fértiles de la rivera y los perdió. Como consecuencia de esto decidió comprar el molino para evitar la servidumbre de paso que existía a través del molino entre los pueblos de Monleras y Sardón de los Frailes, suponemos que como revancha por haber perdido en el pleito el aprovechamiento de los pastos de la rivera.
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