Esta portada es parte de los restos que conservamos del Palacio de los Sora o Salabert. El palacio moderno se derribó en 1936 para abir la calle San Vicente de Paúl, que ordena el urbanismo de la zona del casco histórico de Zaragoza. Se salvó esta portada, del XVII, y un retablo que hoy está en el Museo de Zaragoza.
El palacio se denominó de manera popular como el de Santo Dominguito de Val, al situarse donde en 1492 estuaba la escuela talmúdica, lugar donde según la tradición en 1250 crucificaron al infantico. El episodio fue con total seguridad falseado por la Iglesia de la ciudad en el XVI.
En 1941 la portada se recolocó piedra por piedra en el número 8 de la Calle Salduba, en un edificio diseñado por los hermanos José y Regino Borobio para el Convento de las Hijas de la Caridad de Santa Ana. Forma parte desde entonces del conjunto de la Plaza del Pilar, lugar que el régimen franquista erigio como símbolo de poder y cuyo significado ha virado en una especie de tarjeta de presentación de la ciudad.
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